Fundación Española de Arequipa
Arequipa antes de la llegada de los españoles, estaba conformada por asentamientos humanos de poca jerarquía dentro del sistema urbano del Tahuantinsuyo. Fue una ciudad de paso entre la costa y la sierra (camino al Cusco) sin un importante rol económico o administrativo dentro del imperio.
A la llegada de los españoles, la ciudad de Arequipa, fue fundada por don Manuel Garci de Carbajal el 15 de agosto de 1540 por orden del marqués don Francisco Pizarro fundó la Villa Hermosa de la Asunción del Valle de Arequipa, después de haber trasladado previa consulta y juramento, a los españoles que se habían instalado en Camaná. Fue establecida «encima de la barranca del río» según reza el acta fundacional. A partir de este momento, se proyecta como una urbe foco de desarrollo en el sur del Perú.